El proyecto fue presentado por una persona trans que trabaja en dicho lugar y que denunció discriminación al asistir al “baño de hombres”. Indicará uno de los primeros debates cuando se retomen las sesiones.
Ramiro Rendo trabaja en el despacho de la diputada del Frente de Todos Laura Velasco y presentó un proyecto para crear baños sin género en la Legislatura de la Ciudad ante la discriminación que sufrió por ser una persona trans. El proyecto plantea que exista uno por piso para adaptar las instalaciones al cumplimiento de una ley sancionada en 2012, que promovió el ejercicio pleno de los derechos de las personas LGBTIQ+ y la prevención de situaciones de discriminación.
Ésta iniciativa formará parte de los primeros temas que serán puestos en debate con el comienzo del año parlamentario. El proyecto solicita que exista un sanitario sin distinción de género por piso en todos los edificios que dependen del organismo, entre los cuales se encuentra la sede principal en la manzana de Perú, Diagonal Sur e Hipólito Yrigoyen, a metros de la Plaza de Mayo, en donde trabajan cientos de personas.
A pesar de que en el segundo piso de la Legislatura existe un “baño mixto”, el mismo fue instaurado de manera informal por las empleadas y los empleados de los despachos próximos, y ahora se apunta a darle institucionalidad a la instalación de los sanitarios mediante una ley.
Por otra parte, Rendo indicó que vivió situaciones de discriminación en la Legislatura, donde trabaja desde hace más de tres años, cuando iba al baño de varones, lo que le “hizo pensar en que había que hacer algo” para limitar esos episodios y que no se volvieran a repetir más.
En dicha iniciativa expresó que los baños “puedan ser utilizados tanto por aquellas personas cuya identidad de género se encuentra por fuera del binarismo de género varón-mujer, como por aquellas que no se sientan cómodas con el uso de baños con distinción de género”.
Pero a la vez, «para dar cumplimiento a leyes y normativas que fueron aprobadas por los diputados y las diputadas de la Ciudad de Buenos Aires vinculadas a políticas públicas, que den garantía al pleno goce de derechos de las personas de la comunidad travesti-trans-no binaria”.
Por otro lado, existe la ley 4376, del 2012 sobre Política Pública para el reconocimiento y ejercicio pleno de la ciudadanía de las personas LGBTIQ+, que en uno de sus artículos resalta la implementación de acciones para prevenir situaciones “problemáticas y discriminatorias de los derechos”.
A la vez, la ley nacional 26.743 de Identidad de Género que contempla “el derecho al trato digno, debiéndose respetar la identidad de género adoptada por las personas y el nombre de pila distinto al consignado en su documento nacional de identidad, con tan solo su requerimiento, tanto en los ámbitos públicos como privados”.
“Actualmente, los baños de la Legislatura porteña no están adaptados de acuerdo a las leyes ya mencionadas, ya que se encuentran diferenciados de forma binaria, dejando por fuera a aquellas personas cuya identidad o expresión de género rompe con ese sistema binario”, indicó Rendo.
“En reiteradas ocasiones, hemos vivido situaciones de discriminación en baños de la Legislatura por el mismo hecho de no reconocernos ni como varones ni como mujeres, no respetándose así el trato digno que deberíamos recibir”, manifestó.