En el día de ayer, en horas de la noche, efectivos de la fuerza policial de la Ciudad detuvieron a la referente de AMMAR, Georgina Orellano, y a varias trabajadoras sexuales en el barrio porteño de Constitución.
Asimismo, ayer por la noche, en el barrio porteño de Constitución, la Policía de la Ciudad llevó adelante un violento operativo contra una trabajadora sexual. Durante el operativo golpearon a varias y detuvieron a Georgina Orellano, secretaria General de la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (AMMAR), en el marco de la detención de una trabajadora sexual trans.
“Nuestra secretaria general Georgina Orellano está detenida en la comisaría 1C del barrio de Constitución por ‘resistencia a la autoridad’, una figura que la policía de la ciudad utiliza a menudo para detener de manera arbitraria a las trabajadoras sexuales”, comunicaron en un comunicado desde Ammar a últimas horas del miércoles, cuando se efectuó la detención.
Por otra parte el arresto de la sindicalista se dio cuando intervino en un procedimiento en el cual estaban violentando a una mujer trans. A la vez, en el comunicado explicaron que la intervención se dio “para ‘contener la situación’ la suben al patrullero para que calme y acompañe a la compañera Brenda Miranda intervenida en las calles Avenida Garay y Salta”.
Más tarde relataron que en la comisaría, un subcomisario de apellido Rivero reconoció a Orellana e intentó sacarla tomándola del cuello. En tanto, a causa de ese maltrato, Georgina intentó alejar a Rivero con un cachetazo y es allí cuando la arrestan por resistencia a la autoridad, incomunicada.
Por otro lado, mientras la detenían, la mujer fue amenazada por la policía quienes le decían que no la quieren ver más por Constitución, donde vive Orellano.
Al mismo tiempo, al salir de la comisaria, Orellano comentó: “La compañera entra en una crisis intentamos contener la situación y de común acuerdo decidimos que una de nosotras pudiera acompañar a la comisaría. Me subí yo al patrullero solamente en calidad de acompañante y cuando entramos la situación estaba desmadrada. Hubo un forcejeo de un comisario que me agarra del cuello, y en ese momento intentamos defendernos y me dicen que quedo detenida por resistencia a la autoridad”.