Con políticas del PRO a favor de empresas privadas y cada vez menos espacios verdes, el Jardín Botánico de la Ciudad, se encuentra en alerta a 126 años de su inauguración.
Actualmente, 7 de septiembre, se celebra el Día Nacional de la Botánica en la Argentina, una fecha que rememora la fundación del Jardín Botánico Carlos Thays en 1898, un verdadero pulmón verde situado en el corazón de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En tanto, no sólo es un espacio de conservación de la flora nativa y exótica, sino también un refugio urbano para miles de porteños que cuentan con cada vez menos espacios verdes.
Asimismo, en medio de este festejo, surge una preocupación creciente por el destino de los espacios públicos y verdes en la Ciudad de Buenos Aires, debido a la creciente tendencia de las gestiones del PRO a cederlos a empresas privadas. A la vez, en el caso del Jardín Botánico fue diseñado con una visión de preservación del ambiente natural y educación pública. Noobstante hoy es testigo de un contexto donde el modelo de gestión del espacio público ha cambiado totalmente.
En tanto, a partir de diversos sectores ambientalistas denuncian que la privatización del espacio público fue una de las características más marcadas del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. Asimismo, en los últimos años, el negocio detrás de la privatización del espacio público en la Ciudad ha crecido exponencialmente a través de concesiones, permisos y acuerdos con empresas privadas. Así, Parques, plazas y otros espacios públicos han sido utilizados para proyectos comerciales que, muchas veces, restringen el acceso libre de los vecinos y vecinas.
Por otra parte, en el caso del Jardín Botánico, en 2023, se generó una fuerte polémica por la concesión del jardín para un evento comercial nocturnos llamado Secret Garden. En tanto, los vecinos denunciaron que se estaba levantando una construcción dentro del predio que busca la «continuación de eventos de negocio privado». Asimismo, con la consigna «basta de construcción, uso comercial y contaminación», realizaronprotestas en el Jardín Botánico y presentaron una acción de amparo para pedir «la detención y posterior demolición de la construcción». A la vez, esta acción judicial dio resultados ya que este año se suspendió la obra hasta que se cumplan los requisitos.
Ausencia de espacios verdes
En tanto,con la llegada de Jorge Macri, se mantiene la disputa entre quienes creen que los espacios públicos deben ser de uso comunitario y gratuito y quienes promueven una «modernización» que favorece a empresas privadas. A la vez, el jefe de gobierno de la Ciudad se mantiene en la misma línea que las gestiones anteriores del PRO sobre la modernización de ciertos espacios del distrito.
En tanto, el conflicto se agudiza cuando estos negocios afectan áreas verdes, como es el caso del Jardín Botánico y otros parques emblemáticos de la Ciudad, ya que cada vez son menos. Asimismo, un relevamiento del Gobierno de la Ciudad indicó que la superficie de espacios verdes públicos se incrementó en 104,6 hectáreas desde el año 2019 a 2023: pasó de 2.063,1 a 2.167,7 hectáreas.
No obstante, desde el Observatorio del Derecho a la Ciudad (ODC) advirtieron: “A las 104 ha nuevas de espacios verdes debemos restar las 31,2 correspondientes a canteros, veredas y derivadores de tránsito (que no son espacios verdes, salvo que piensen que las personas puedan llevar sus reposeras a los canteros o hacer picnic en los derivadores de tránsito) y las hectáreas que el informe indica que se perdieron y nos quedarían 73,4 ha nuevas”. Al mismo tiempo, según la Fundación Bunge y Born, Buenos Aires es una de las ciudades con menos zonas verdes por habitante.
Por otra parte, la posibilidad de que el modelo de gestión privatizador aplicado en otras áreas de la Ciudad llegue a afectar al Jardín Botánico genera alarma entre ambientalistas, urbanistas y ciudadanos preocupados por el futuro del espacio público. En tanto, se conmemora su aniversario, la reflexión sobre el uso y el destino de los espacios verdes de Buenos Aires se vuelve más crucial. ¿Se respetará el legado de Thays y el propósito original de preservar el acceso público a la naturaleza, o este también será un espacio más en la creciente lista de lugares privatizados por el Gobierno de la Ciudad?