Se agregarían 3695 sitios en la vía pública para dejar los automóviles; se deberá pagar $176 la hora a través de una aplicación.
Asimismo, el estacionamiento medido se extenderá en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, mientras se posterga el debate de fondo para la regularización del sistema de grúas de acarreo de vehículos en infracción, dos sistemas que están ligados y forman parte de la misma política de movilidad y reordenamiento del tránsito.
Por el momento los espacios tarifados están en el micro y macro centro, además de algunos sectores de Recoleta. La ampliación sumará 3695 sitios en la vía pública en los que, para dejar los automóviles, se deberá pagar $176 la hora a través de una aplicación, aunque habrá un valor diferencial más caro a partir de la segunda hora y los residentes podrán estacionar gratis en un radio de hasta 300 metros.
En tanto, la medida se aplicará a partir de mayo en Puerto Madero, que se sumará a los barrios de San Telmo, Monserrat, Balvanera, San Nicolás, Retiro y Recoleta donde ya funciona la tarifa. Primero habrá un período de concientización de un mes para explicar a los usuarios cuál será la forma de implementar los cambios.
Por otra parte, el estacionamiento medido funcionará de lunes a viernes, de 8 a 20, y los sábados de 8 a 13. Los domingos y feriados no tiene vigencia. Con esta medida el Gobierno porteño busca mejorar el ordenamiento y la seguridad vial en las calles, alentar la rotación de estacionamiento en la zona y desincentivar el estacionamiento prolongado de visitantes, lo que reduce la cantidad de lugares para estacionar.
Al mismo tiempo, en números, se agregarán 168 cuadras al sistema controlado mediante la app Blinkay que permite abonar la estadía mediante tarjeta de débito, crédito o Mercado Pago; también se puede abonar en efectivo en los comercios adheridos.
En cuanto a los espacios tarifados, hasta el momento en toda la ciudad hay 4457 y en Puerto Madero se sumarán 3695 por lo que la plaza aumentará considerablemente. Después de la primera hora habrá un valor diferencial en los lugares de estacionamiento que requieran mayor rotación, con un aumento del 30% hora respecto al valor inicial.
Asimismo, el estacionamiento medido en la ciudad de Buenos Aires se transformó a mediados de 2022. La implementación del sistema digital, sin parquímetros ni cospeles, está a cargo del Ministerio de Infraestructura de la Ciudad.
“Estamos comprometidos con la mejora constante de nuestra ciudad y la inclusión de Puerto Madero en la zona tarifada de estacionamiento medido es un paso importante en ese camino”, sostuvo el titular de la cartera, Pablo Bereciartúa. “Esta medida busca no solo optimizar la fluidez del tránsito, sino también mejorar el ordenamiento urbano y garantizar la seguridad vial en nuestras calles. Es fundamental fomentar la rotación de estacionamiento, permitiendo así que quienes llegan al barrio tengan más espacios disponibles. De esta manera estamos construyendo una ciudad más ordenada, segura y amigable para todos los vecinos”, dijo el funcionario.
En tanto, la llegada del estacionamiento medido a Puerto Madero incluye también los beneficios para los residentes en el barrio. Aquellas personas que vivan dentro de la zona tarifada pueden solicitar el beneficio de estacionamiento en un radio de hasta 300 metros de su domicilio. La inscripción se debe realizar en el sitio oficial del Gobierno de la Ciudad.
Por otra parte, los requisitos para acceder al beneficio son:Tener cuenta de miBA, Contar con DNI o un servicio con domicilio dentro de la zona tarifada, Contar con número de partida de ABL del domicilio (no hace falta ser titular de la boleta). Y el dígito verificador (DV) además de la partida (7 dígitos de partida + 2 DV), Poseer cédula única de identificación del vehículo (ex cédula verde) o cédula para estar autorizado a conducir (ex cédula azul).
El vehículo registrado no debe tener deuda del Impuesto de Radicación de Vehículos e Infracciones de Tránsito. En caso de tenerla, el vecino puede acceder al beneficio y saldar la deuda dentro de los 12 meses de vigencia
En tanto, para terminar con la doble fila en las escuelas de CABA, el programa Sube y Baja, funciona según el gobierno porteño. Asimismo, ya participan 200 establecimientos educativos de la ciudad de Buenos Aires; tiene como objetivo la seguridad y el reordenamiento en el tránsito
En tanto, con el objetivo de terminar con la doble fila de autos de los padres que dejan a sus hijos en las escuelas, el gobierno de la ciudad de Buenos Aires lleva adelante el programa Sube y Baja, un sistema en el cual voluntarios elegidos por la institución educativa abre las puertas de los vehículos y asiste a los chicos para que entren al establecimiento de manera segura. La iniciativa tiene como objetivo garantizar tanto la seguridad vial de los niños como el ordenamiento del tránsito en el momento de entrada y salida de la escuela.
A la vez, la doble fila en los colegios, el estacionamiento en las esquinas que obstruye las rampas para personas con movilidad reducida, e incluso el estacionamiento sobre las veredas, son las infracciones más comunes en las zonas donde se encuentran escuelas, según el gobierno porteño. El valor de la infracción por estacionamiento indebido, que implica doble fila, va de 100 a 300 unidades fijas (UF). El valor de la UF es de $471,39, por lo que las multas por este tipo de falta oscilan entre los $47.139 y $141.417.
Por otro lado, desde la cartera de Infraestructura de la Ciudad detallaron que el sistema venía funcionando en 175 colegios y sumó 25 establecimientos en los últimos 12 meses. Por lo tanto, el 25% de escuelas públicas y privadas (200) utilizan este mecanismo.
“Para garantizar el correcto funcionamiento del programa, cada colegio cuenta con un voluntario, designado por el colegio. Éste es quien abre la puerta de los vehículos cuando llegan al colegio, asiste a los niños en el descenso para que el padre/madre/tutor no se baje del vehículo y continúe con su rol de conductor, cierra la puerta del auto para que se incorporen al flujo vehicular”, indicaron sobre el funcionamiento del proyecto.
Al mismo tiempo, sostuvieron que esto logra disminuir la doble fila, una práctica habitual entre los vecinos pero que está prohibida en la Ciudad. “Muchas veces las calles son vistas como un espacio desfavorable para los chicos ante la presencia de vehículos, por ello con Sube y Baja se busca recuperar el espacio público para los más pequeños adaptándolo a sus necesidades y fomentando su autonomía”, agregaron en esa misma línea.
En tanto, en términos de intervención, Sube y Baja implica una demarcación amarilla sobre la calzada, con un carril pasante, donde ingresa el vehículo con los voluntarios a la espera para asistir al niño. Asimismo, se señaliza la zona con entre discos de prohibido estacionar, rombo amarillo de escuela en las esquinas y cartel de máxima velocidad en el comienzo de la cuadra donde se encuentra la escuela.
A la vez, el programa ya cuenta con la adhesión de 162 escuelas privadas, 31 de gestión pública y siete de educación especial. En tanto, 106.000 alumnos son beneficiados diariamente por el programa, que también implica el 100% de la disminución de la doble fila y 20 minutos de reducción en el tiempo de entrada.
Por otro lado, la incorporación al Programa es a nivel institucional y las escuelas que quieran sumarse, deberán mandar un mail a [email protected] y el equipo se pondrá en contacto para evaluar dicho pedido.