La diputada del FdT afirmó que existen cuatro formas de solucionar esa situación: a través del alquiler, urbanización de los barrios populares, creando lotes de servicios en tierras abandonadas y promoviendo la repoblación de pueblos.
Con la crisis habitacional que padece la Ciudad de Buenos Aires y el resto de la Argentina, la diputada del Frente de Todos (FdT) Ofelia Fernández presentó cuatro proyectos para solucionar esa situación: a través del alquiler, urbanizando barrios populares, creando lotes de servicios en tierras abandonadas y promoviendo la repoblación de pueblos.
Asimismo, la legisladora comunicó que “tenemos un plan para que cada uno de nosotros pueda tener un lugar donde vivir sabemos cómo y dónde hacerlo, cuánto cuesta, como financiarlo. Sé que suena ambicioso, pero Argentina es el octavo país más grande del mundo. O sea, espacio no falta, incluso donde no lo parece” y advirtió que “en la Ciudad de Buenos Aires hay 200 mil viviendas vacías. No tiene que haber ni gente sin casas, ni casas sin gente”.
Por otra parte, la primera de esas iniciativas tiene que ver con el alquiler. “Sonaría mejor hablar de casa propia, pero el alquiler es una realidad. Cada vez hay más inquilinos, el tema es que abusan de esta realidad, que te quieren cobrar en dólares, que se te va la mitad del sueldo, en contratos que quieren hacer cada vez más cortos o que ni siquiera logres reservar uno”, comenzó expresando y planteó que “alquiler puede no ser sinónimo de esta tortura, pero hay un tema que es que hay lugares que tienen cuatro paredes, un dormitorio, un baño, una puerta, pero no son casas, son cajas de ahorro”.
“Hay gente que compra muchas viviendas para sacarle la mayor cantidad de guita posible. No juzgo, realmente es un momento económico difícil que lo incentiva, no es un tema moral, pero el Estado tiene que garantizar el derecho a la vivienda de la mayoría de las personas, no la renta de una minoría que especula y/o la deja vacía o la pone en alquiler turístico”, comentó.
Por otra parte dijo que “ciudades europeas, latinoamericanas y norteamericanas tienen impuestos a la vivienda ociosa para quienes tengan más de tres propiedades, esto es mínimo, razonable. Airbnb se está empezando incluso a prohibir en grandes ciudades porque, claro, te conviene ponerlo tres días en alquiler y ganar una barbaridad en dólares; pero eso no puede ser una excusa para que no haya lugares y opciones para quienes viven acá. Hay que regularlo, o sea, los que están jodidos con este tema son los inquilinos, no los propietarios. Pero se habla de este tema y parece que los inquilinos se tienen que fumar la que venga y que los propietarios de cuatro departamentos son reyes intocables”.
“No digo que sea al revés, pero hay que equilibrar un poco la cosa y no todo se trata de intervenir el mercado. De hecho, de a poco se puede cambiar la mirada de raíz, Argentina puede en cinco años garantizar un 5% de stock de alquileres sociales o accesibles”, continuó y subrayó que “en Viena, por ejemplo, el 60% de los alquileres son protegidos. Tener tu propia oferta, generalmente orientada a gente joven o adultos mayores, que los precios consideren a los salarios y que compitiendo puedan forzar a que bajen los demás sin requisitos insólitos. Si se empieza a trabajar ya, se puede conseguir que alquilar sea algo distinto”.
Luego, en segundo lugar, Fernández insistió en la necesidad de urbanizar los barrios populares. “Las viviendas están adentro de barrios y en Argentina hay millones de personas que viven en barrios sin agua, cloacas, gas, veredas, generando focos terribles de clandestinidad, inseguridad e injusticia. Esto no es estructural, no hay que acostumbrarse. Hay 5687 barrios populares, ese relevamiento ya está hecho. Estos años, con la Ley de Barrios Populares, y el aporte solidario de las grandes fortunas, se pudo avanzar mucho. Con un plan quincenal y un sentido de prioridad humano elemental se pueden urbanizar esos barrios como exige la Ley”, manifestó.
“Lo tercero son los lotes con servicios en tierras abandonadas, tierras del Estado, tierras que se pueden comprar, garantizar un millón de terrenos con servicio y transporte para que la gente pueda después ahí construir su casa en propiedad, a máximo 30 kilómetros de donde vivían. Esto lo vimos en los mapas, realizamos los estudios, es el 0,24% del PBI, se puede hacer, es un tema de planificación y voluntad”, dijo la diputada del FdT.
Asimismo, Ofelia hablo acerca de la posibilidad de repoblar pueblos o ciudades del interior de la Argentina. “Esta es jodida, pero es importante reconocer a tiempo y de preparar algunas ideas, porque hay mucha gente que se está queriendo ir de las grandes ciudades y el asfalto, a lugares de más tranquilidad y naturaleza. El último censo comprueba que está existiendo este movimiento porque las nuevas modalidades de teletrabajo incentivan un deseo que hay que poder planificar para revitalizar miles de pueblos argentinos. Organizándolo bien con cuidado, cosa de que esos pueblos no sufran cambios abruptos en sus precios, cultura, estilo de vida para las personas que ya viven ahí”, comentó.
“Básicamente estoy convencida de que el acceso a la vivienda es uno de los temas más importantes del presente. Estudiamos con mucho tiempo y dedicación estas ideas, y si pensamos una solución integral. Se puede salir del laberinto”, finalizó.