En un evento empresario en el Palacio Duhau, el jefe de gobierno Horacio Rodriguez Larreta propuso «una reforma integral, profunda, sin media tintas» y citó el camino de Cavallo «en octubre del ‘91!». Por otra parte, habló de «coalición a la europea» y evitó colisionar con Patricia Bullrich.

En tanto el país atraviesa tiempo de crisis cambiaria en parte producto, de acuerdo al Gobierno, de pedidos y operaciones que economistas de Juntos por el Cambio efectuaron ante el FMI, uno de sus precandidatos presidenciales, Horacio Rodríguez Larreta, se presentó ante empresarios y utilizó esa muestra para radicalizar el perfil económico de sus propuestas, seguramente con el objetivo de apelar a su apoyo de frente al conflicto interno que enfrenta con Patricia Bullrich por ese mismo público.

Al mismo tiempo, en un encuentro organizado por LIDE Argentina en el Palacio Duhau-Park Hyatt Buenos Aires, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires prometió una “reforma integral profunda sin media tintas” y se encontró a favor de ir en un eventual gobierno suyo hacia una “brutal desregulación de la economía, como hizo (Domingo Felipe) Cavallo”.

“La reforma tiene que ser integral, profunda, sin media tintas, un cambio en todos los aspectos de la vida institucional”, advirtió Larreta al presentar su proyecto para el gobierno nacional. Al mismo tiempo,  en ese punto es que citó al ex ministro de Economía de Carlos Saúl Menem y Fernando de la Rúa: “Luego hay que hacer una brutal desregulación de la economía, como lo hizo Cavallo en octubre del ‘91!».

«Coincidimos en un diagnóstico grave de la situación de la Argentina. Yo estoy convencido de que la solución es para adelante, un cambio profundo, real y duradero, en el marco de un país democrático, con el acuerdo del Congreso para llevarlo adelante, ese es el camino», indicó el funcionario de la Ciudad en referencia de su mirada y la de los empresarios.

Bajo esa misma línea, les afirmó que el cambio que defiende debe ser «sin gradualismo” y «en todos los aspectos de la vida institucional», porque «no sirve que logremos recuperar la economía en un principio, sin una reforma educativa profunda que nos garantice el capital humano necesario para sostener en el tiempo el cambio, ese es el gran desafío».

Paralelamente, durante su exposición, Rodriguez Larreta enumeró tres propuestas determinantes, que se encuentran bajo análisis, aunque sin precisiones: «Primero hay que adecuar el sistema laboral. Terminar con la ley que genera la industria del juicio, con las indemnizaciones. Hace 12 años que el empleo formal no crece en la Argentina. Y hay que hacerlo en el primer día, no a los seis meses”, comenzó.

“Luego hay que hacer una brutal desregulación de la economía, como lo hizo (Domingo) Cavallo en octubre del ‘91. Lanzar un plan de infraestructura para agilizar la logística del transporte, de la energía, con prioridad en la eficiencia y ganar en productividad, sobre todo si queremos un país federal”, dijo.

Y, al finalizar: «Hay que replantear el sistema impositivo con dos objetivos: más dólares para salir de la órbita legal del tipo del cambio y segundo generar más trabajo».

En referencia a la reforma del sistema impositivo, manifestó que «Ingresos Brutos es un impuesto totalmente distorsivo que se va cargando en toda la cadena de valor», siguió con que «las retenciones castiga a la principal fuente de dólares, pero cuidado, las estrategias han fallado en la Argentina en los último 60 años, salvo en seis donde se priorizaron los números».

«Primero tenemos que mirar los números. Planteamos un equilibrio fiscal con baja del gasto (público) 4 o 5 puntos, no hay antecedentes en el mundo, es titánico. Hay un montón de medidas estratégicas, pero si los números no cierran no hay estrategia que valga», comentó.

Y consultado acerca de cuáles serían las tres medidas que debería tomar si llega al Gobierno Nacional: «No hay que tomar tres medidas, hay que tomar 3.000, todas las decisiones son importantes. A mí me toca gobernar todos los días, todos los días tomo decisiones, hay que ocuparse de todo con una visión de integralidad, de forma conjunta, porque en el Gobierno no todo es priorizable, y para eso se necesita de la experiencia y la capacidad de gestión. Eso lo toman en cuenta a la hora de contratar un gerente. Para esta tarea se necesita algo parecido. Se necesita alguien que sepa cómo se hacen las cosas», expresó.

Durante la charla, Rodriguez Larreta enfatizó acerca de  su estrategia de evitar responder a las duras críticas que le proyecta su adversaria intra PRO, Bullrich, y Javier Milei, el aspirante presidencial de La Libertad Avanza.

«En la conformación de un gobierno de coalición a la europea, donde hay un acuerdo», expresó acerca de su objetivo, aunque a la vez aclaró «nunca será con el kirchnerismo, la extrema izquierda o la extrema derecha, que viven en otro mundo».

«No creo en los extremos, creo que son nefastos para un país. No será fácil, pero estoy convencido que de otra manera vamos de nuevo al fracaso», indicó.

Y consultado acerca de las diferencias y parecidos con otros candidatos, como Bullrich y Milei, la sacó afuera citando a su abuela. «Ella decía que las comparaciones son odiosas. Yo digo lo que represento, lo que ofrezco, y luego ustedes sacan sus conclusiones. No opino sobre otros candidatos. Lo que digo lo tengo para validar con lo que hice en la Ciudad y la convicción del diálogo, que no es acuerdo, sea quien sea. Hay que tener coraje con el que piensa distinto, sentarse y llegar a un acuerdo», finalizó.