Se trata de un árbol nativo propio de las selvas tropicales y subtropicales de América del Sur, que fue adaptado para habitar en nuestro clima. Asimismo, se lo puede disfrutar en calles y parques de la Ciudad. Aparte de otorgar grandes beneficios ambientales, es un ícono de la amistad entre Argentina y Uruguay.
Por otro lado, como consecuencia de la gratitud a las altas temperaturas y las lluvias ocacinales de estas últimas semanas, en la Ciudad de Buenos Aires florecieron los Ibirapitá. Identificado con el nombre científico de Peltophorum dubium; en el idioma popular su denominación significa «de madera colorada». Esta especie de árbol desarrolla grandes dimensiones de entre 20 a 25 metros de altura. A la impronta de su tamaño, se suma la belleza de sus flores en forma de racimos de un color amarillo que, en contraste con su follaje intenso de color verde, lo hacen muy particular.
Tanto los porteños como las porteñas y los visitantes pueden contemplar su belleza y su sombra en las veredas y a la vez, en los parques. Asimismo, desde el Metrobús se los puede vislumbrar en plaza Italia sobre la avenida Santa Fe entre las calles Darregueira y Thames. A la vez, existe un corredor sobre la av. Forest entre la Pampa y av. de los Incas; en el centro se los puede apreciar en la av. 9 de Julio entre Chile e Independencia.
Debido a su gran aspecto, el plan maestro de arbolado de la Ciudad de Buenos Aires prevé ocupar 243 calles con esta especie, que necesita para su plantación veredas o espacios de grandes extensiones. Por otro lado, en la avenida de los Constituyentes en la intersección con el paso bajo nivel del ferrocarril Mitre ya se plantaron otros ejemplares que están exhibiendo sus floraciones. A la vez, se encuentran más ejemplares en el parque Avellaneda, también en el parque 3 de febrero y en el del Centenario situado en el barrio porteño de Caballito.
Una muestra de amistad entre Argentina y Uruguay
Cuenta la leyenda popular que el prócer oriental José Gervasio Artigas se exilió en Paraguay, y en ese país el gobierno le concedió una villa llamada San Isidro de Curuguaty, un espacio cercano a la capital Asunción, donde Artigas plantó un ejemplar de Ibirapitá para poder tomar mate bajo la sombra.
El ejemplar se quedó en el sentimiento de los vecinos y vecinas orientales a la vez que el prócer habría transcurrido sus últimos años debajo de Esta sombra, razón por la que en el país vecino se lo denomina árbol de Artigas. Asimismo, en la plaza 25 de Agosto situada entre las calles Heredia, Giribone, Charlone y 14 de Julio, hay un ejemplar histórico que se desarrolló de un retoño proveniente del “árbol de Artigas” que fue ofrecido a la Ciudad por la colectividad oriental. Debido a ello este árbol se erigió como un símbolo de la fraternidad argentino-uruguaya.
Por otro lado, hay que destacar que la Ciudad de Buenos Aires desea incorporar nuevos ejemplares durante este año. “En este 2022 ingresamos al cuarto año de nuestro plan quinquenal que supone la plantación de nuevos ejemplares y el mantenimiento de la totalidad de nuestros árboles en ese período de tiempo”, indicó Julia Domeniconi, secretaria de Atención Ciudadana y gestión Comunal. “Los vecinos pueden solicitar la plantación de ejemplares a través de la web www.buenosaires.gob.ar o nuestra aplicación BA147 para que sean incorporados en la campaña de forestación que comenzará a fines de mayo de este año”.
Por otra parte, la Ciudad de Buenos Aires lanzó a principios de 2022 Arbopedia, un novedoso portal web que le permite a los vecinos y vecinas acceder a los planes de forestación, participar en los programas de cuidados, en las campañas de concientización, censos, descripción de ejemplares y conocer el arbolado público de la Ciudad de Buenos Aires en su totalidad. A la vez, al finalizar 2021 la Ciudad plantó más de 16 mil nuevos ejemplares reponiendo la totalidad de extracciones y agregando más de 10 mil árboles de diferentes especies entre las que se destacan el Jacarandá, Tilo, Crespón, Liquidambar, Anacahuita, Pata de Buey, Lapacho, Arce Tridente, Fresno Dorado. Asimismo, se plantaron especies nativas como Canelones y Lecherones.